BIENVENIDOS AL I.E.S. CONCHA VELASCO

La definición del concepto de educación ha sido llevada a cabo por muchas personas a lo largo de la historia. Es difícil definir una palabra que engloba tantas cosas y que, queramos o no, es tan relevante en nuestras vidas. La dificultad de su definición ha quedado clara desde el principio de esta actividad en clase. 

Tras mucho debate, reflexión, cambio de las palabras elegidas, del orden de su aparición llegamos a la conclusión de que si nos mandaran definir educación lo haríamos como “Proceso para formar buenos ciudadanos, transmitiendo conocimientos y valores a través del pensamiento crítico”

Pero ¿por qué buenos ciudadanos? Creemos que lo más importante, antes que dar los contenidos de una materia es hacer que nuestros alumnos sean buenas personas. No tiene ningún sentido que sepan resolver raíces cuadradas si no son capaces de ayudar a alguien que lo necesite. En este mismo sentido hemos introducido en la definición la idea de transmitir valores al mismo tiempo que el conocimiento por que no creemos que tenga sentido explicar solamente el primero. La inclusión del pensamiento crítico en la definición se debe a que nada tiene que ser tomado como ley, es muy fácil llegar a pensar que los niños son adoctrinados, por eso queremos darles las herramientas para que cuestionen aquello que no les parece adecuado, tanto a nivel teórico como en lo relativo a los valores.

En lo relativo a los valores que les vamos a inculcar a los jóvenes que asistan a nuestro instituto creemos que en un primer rango deben estar la salud, la familia, una moral digna y las amistades puesto que son cuatro pilares necesarios para el buen desarrollo de los estudiantes. En un puesto cinco estarían los estudios, puesto que pensamos que, si bien somos un centro de enseñanza, nada tenemos que hacer con nuestros estudiantes si no tienen en cierta medida desarrollados los tres anteriores. El trabajo, ocio y ganar dinero las hemos ubicado en los siguientes puestos porque consideramos que es necesario que valoren de forma adecuada y correlacionada estos tres aspectos. Política, pareja, relaciones sexuales satisfactorias y religión lo hemos dejado en un último grupo puesto que pensamos que el centro no debe entrar a valorar este tipo de temas que deben ser tratados mejor en otros contextos.

En lo relativo a los comportamientos morales creemos que es completamente aceptable, y al mismo nivel sin necesidad de poner ningún orden la posibilidad de las personas de abortar, hacer adopciones por parte de padres homosexuales o por padres sin relación estable, divorciarse, las relaciones sexuales entre menores de edad y tener hijos fuera del matrimonio. Consideramos como inaceptable, y en este caso estaría más graduado la clonación de personas, engañar en el pago de impuestos, la pena de muerte, el terrorismo, y la violencia de género como completamente inaceptables. En un segundo grupo de no aceptables pero en un grado menor situaríamos causar destrozos en la calle, emborracharse a propósito, evitar pagar el billete en el transporte público, hacer ruido los fines de semana, mentir en tu propio interés personal, tener una aventura fuera del matrimonio y tomar drogas. Temas como el suicidio necesitarían ser tratados en el centro por otro tipo de profesionales.

En cuanto a los motivos por lo que los jóvenes discuten con sus padres probablemente sean situaciones que cambian con la edad debido al cambio que se produce en sus intereses. Probablemente política y religión sean los temas menos frecuentes, llevándose la palma el dinero, la hora de llegada, pasar la noche fuera, el alcohol y las amistades. Los estudios pueden también ser situación de conflicto y debemos saber cómo ayudar a ambas partes a solventar el tema.